Un sembrador siembra semillas pero solo una especia una especia ya que caen entre piedras, otras en tierra mala, al final solo crecen las de la tierra buena.
Zaqueo. La parábola de Zaqueo trata de un hombre que era muy rico y no ayudaba a los pobres. Un día se enteró de que Jesús iba a su pueblo, se subió a un árbol para verlo ya que él era muy pequeño. Cuando lo vio Jesús le dijo que bajara y que no fuera tan malo con los demás y que compartiera con todo el mundo. Desde entonces Zaqueo cambió y era muy solidario con toda la gente que necesitaba ayuda.
La parábola es muy bonita. Enseña la paciencia que debes de tener para hacer algo. Por ejemplo el hombre sembró semillas en sitios malos pero el nunca se rindió, y cuando por fin crecieron el hombre se puso muy contento por el esfuerzo y el empeño que le puso. La parábola enseña que no hay que ser impaciente.
LA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO La parábola trata de un señor que tenía dos hijos a los que repartió su herencia. Uno se fue de su casa con la herencia y al cabo de poco tiempo la gastó y se tuvo que poner a trabajar mientras que su hermano estaba con su padre en su casa y no gastó su herencia. Después de mucho tiempo el hijo menor volvió y su padre se puso muy contento y realizó una cena en su honor.
PARÁBOLA DEL BUEN SEMBRADOR Un sembrador tiró semillas al campo. Unas cayeron en el camino pero los pájaros se las comieron. Otras cayeron sobre las piedras de un pedregal pero al salir el sol se secaron. Al final, unas semillas que habían caído sobre tierra fértil brotaron, crecieron y dieron su fruto, y al fin el sembrador pudo recogerlos.
La parábola trata sobre una persona que se encuentra tirada en el suelo. Pasa una persona de su misma religión y no le ayuda. Luego, pasa una persona de distinta religión y le ayuda. Esta parábola significa que hay que ayudar a todas las personas que sean de distinta religión, color... para ser buenos cristianos.
BEATRIZ MORALES JIMÉNEZ Y MINERVA MORENO GUERRERO, 1º E.S.O
A lo suyo vino,y los suyos no recibieron. Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre,les dio potestad de ser hechos hijos de Dios.
"El Reino de los Cielos es semejante al grano de mostaza que tomó un hombre y lo sembró en su campo; es ciertamente la más pequeña de todas las semillas, pero cuando ha crecido es la mayor de las hortalizas, y llega a ser como un árbol, hasta el punto de que los pájaros del cielo acuden a anidar en sus ramas".
El buen Samaritano 30 Jesús respondió: «Bajaba un hombre de Jerusalén a Jericó, y cayó en manos de salteadores, que, después de despojarle y golpearle, se fueron dejándole medio muerto. 31 Casualmente, bajaba por aquel camino un sacerdote y, al verle, dio un rodeo. 32 De igual modo, un levita que pasaba por aquel sitio le vio y dio un rodeo. 33 Pero un samaritano que iba de camino llegó junto a él, y al verle tuvo compasión; 34 y, acercándose, vendó sus heridas, echando en ellas aceite y vino; y montándole sobre su propia cabalgadura, le llevó a una posada y cuidó de él. 35 Al día siguiente, sacando dos denarios, se los dio al posadero y dijo: "Cuida de él y, si gastas algo más, te lo pagaré cuando vuelva." 36 ¿Quién de estos tres te parece que fue prójimo del que cayó en manos de los salteadores?» 37 El dijo: «El que practicó la misericordia con él.» Díjole Jesús: «Vete y haz tú lo mismo.»
"Salió un sembrador a sembrar su simiente; y al sembrar, una parte cayó a lo largo del camino, fue pisada, y las aves del cielo se la comieron; otra cayó sobre piedra, y después de brotar, se secó, por no tener humedad; otra cayó en medio de abrojos, y creciendo con ella los abrojos, la ahogaron. Y otra cayó en tierra buena, y creciendo dio fruto centuplicado."
Dicho esto, exclamó: "El que tenga oídos para oír, que oiga."
María Santiago Cobos y Lucía Jiménez Rodríguez 1º ESO
La levadura forma parte del pan, pero está en más avanzado estado de desarrollo y pueda operar el cambio de toda la masa que le rodea.
"El Reino de los Cielos es semejante a la levadura que toma una mujer y mezcla con tres medidas de harina, hasta que todo fermenta".
El que acepta el reino no debe separarse del resto de los hombres, por inmaduros que estén. Pero debe tener fuerza interior, entonces, se obrará el prodigio de cambiar la masa amorfa en buen pan de buen trigo.
Les refirió otra parábola, diciendo: El reino de los cielos es semejante a un hombre que sembró buena semilla en su campo; pero mientras dormían los hombres, vino su enemigo y sembró cizaña entre el trigo, y se fue. Y cuando salió la hierba y dio fruto, entonces apareció también la cizaña. Vinieron entonces los siervos del padre de familia y le dijeron: Señor, ¿no sembraste buena semilla en tu campo? ¿De dónde, pues, tiene cizaña? El les dijo: Un enemigo ha hecho esto. Y los siervos le dijeron: ¿Quieres, pues, que vayamos y la arranquemos? El les dijo: No, no sea que al arrancar la cizaña, arranquéis también con ella el trigo. Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega; y al tiempo de la siega yo diré a los segadores: Recoged primero la cizaña, y atadla en manojos para quemarla; pero recoged el trigo en mi granero».
PALÁBOLA DEL BUEN SEMBRADOR. Un hombre sembró semillas en un camino pero no crecieron porque los pájaros se comieron las semillas. Luego sembró en el campo y si crecieron. Y por último sembró en piedras crecieron pero al poco tiempo se secan. Y al final de la parábola el hombre pudo recoger las buenas plantas que crecieron en el campo.
Esta parábola explica que un hombre recibió una paliza y quedó tirado en el camino. Por allí pasó gente cristiana de la que se esperaba ayuda, pero no le hicieron ni caso y no le ayudaron. Luego pasó un samaritano, que con mucho gusto le ayudó a levantarse y le curó las heridas.
Esta parábola quiere enseñarnos que hay gente de la que esperas ayuda y no la recibes, y sin embargo de otra que no te esperas que te ayuden y te ayudan.
María Rico Pulido & Ana Mª Peinado Valenzuela 1º ESO
Un hombre siembra semillas por muchos lugares del campo. Algunas semillas cayeron en el camino, otras en las piedras y otras pocas cayeron por un lugar fértil. Las que cayeron en el camino, se las comieron los pájaros, las que cayeron en los pedregales, brotaron pero se secaron, pero las que cayeron en tierra fértil, brotaron y y dieron lugar a unas plantas fértiles que dieron frutos. Esto nos enseña que necesitamos tener un corazón recto y bueno para poder dar mucho fruto.
Irene Navas Guerrero y María Jesús Bermúdez Rico 1º ESO.
Es lo que mejor me se, que quiere enseñarnos que hay que tener paciencia si quieres conseguir lo que deseas. Yo tengo bien poca paciencia por eso me parece tan buena esta parábola.
Un sembrador siembra semillas pero solo una especia una especia ya que caen entre piedras, otras en tierra mala, al final solo crecen las de la tierra buena.
ResponderEliminarMÓNICA RICO Y ZOYLA GÁMEZ 2 E.S.O
Zaqueo.
ResponderEliminarLa parábola de Zaqueo trata de un hombre que era muy rico y no ayudaba a los pobres. Un día se enteró de que Jesús iba a su pueblo, se subió a un árbol para verlo ya que él era muy pequeño. Cuando lo vio Jesús le dijo que bajara y que no fuera tan malo con los demás y que compartiera con todo el mundo. Desde entonces Zaqueo cambió y era muy solidario con toda la gente que necesitaba ayuda.
Rocío Fuentes y Celia Gómez. 2ºESO.
Hola.
ResponderEliminarEL SEMBRADOR
La parábola es muy bonita. Enseña la paciencia que debes de tener para hacer algo.
Por ejemplo el hombre sembró semillas en sitios malos pero el nunca se rindió, y cuando por fin crecieron el hombre se puso muy contento por el esfuerzo y el empeño que le puso.
La parábola enseña que no hay que ser impaciente.
NOELIA JIMÉNEZ MORENO
LA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO
ResponderEliminarLa parábola trata de un señor que tenía dos hijos a los que repartió su herencia. Uno se fue de su casa con la herencia y al cabo de poco tiempo la gastó y se tuvo que poner a trabajar mientras que su hermano estaba con su padre en su casa y no gastó su herencia.
Después de mucho tiempo el hijo menor volvió y su padre se puso muy contento y realizó una cena en su honor.
SONIA MORALES Y NOELIA MORENO 2ºESO
PARÁBOLA DEL BUEN SEMBRADOR
ResponderEliminarUn sembrador tiró semillas al campo. Unas cayeron en el camino pero los pájaros se las comieron. Otras cayeron sobre las piedras de un pedregal pero al salir el sol se secaron. Al final, unas semillas que habían caído sobre tierra fértil brotaron, crecieron y dieron su fruto, y al fin el sembrador pudo recogerlos.
ROSA LEYVA E INMA ALCAIDE, 2º ESO
PARÁBOLA DEL BUEN SAMARITANO.
ResponderEliminarLa parábola trata sobre una persona que se encuentra tirada en el suelo. Pasa una persona de su misma religión y no le ayuda. Luego, pasa una persona de distinta religión y le ayuda. Esta parábola significa que hay que ayudar a todas las personas que sean de distinta religión, color... para ser buenos cristianos.
BEATRIZ MORALES JIMÉNEZ Y MINERVA MORENO GUERRERO, 1º E.S.O
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ResponderEliminarA lo suyo vino,y los suyos no recibieron.
ResponderEliminarMas a todos los que le recibieron,
a los que creen en su nombre,les dio
potestad de ser hechos hijos de Dios.
Parabola del grano de Mostaza.
ResponderEliminar"El Reino de los Cielos es semejante al grano de mostaza que tomó un hombre y lo sembró en su campo; es ciertamente la más pequeña de todas las semillas, pero cuando ha crecido es la mayor de las hortalizas, y llega a ser como un árbol, hasta el punto de que los pájaros del cielo acuden a anidar en sus ramas".
Mariano Jerónimo Sanjuán Pérez 1ºESO.
El buen Samaritano
ResponderEliminar30 Jesús respondió: «Bajaba un hombre de Jerusalén a Jericó, y cayó en manos de salteadores, que, después de despojarle y golpearle, se fueron dejándole medio muerto. 31 Casualmente, bajaba por aquel camino un sacerdote y, al verle, dio un rodeo. 32 De igual modo, un levita que pasaba por aquel sitio le vio y dio un rodeo. 33 Pero un samaritano que iba de camino llegó junto a él, y al verle tuvo compasión; 34 y, acercándose, vendó sus heridas, echando en ellas aceite y vino; y montándole sobre su propia cabalgadura, le llevó a una posada y cuidó de él. 35 Al día siguiente, sacando dos denarios, se los dio al posadero y dijo: "Cuida de él y, si gastas algo más, te lo pagaré cuando vuelva." 36 ¿Quién de estos tres te parece que fue prójimo del que cayó en manos de los salteadores?» 37 El dijo: «El que practicó la misericordia con él.» Díjole Jesús: «Vete y haz tú lo mismo.»
PARÁBOLA DEL SEMBRADOR
ResponderEliminar"Salió un sembrador a sembrar su simiente; y al sembrar, una parte cayó a lo largo del camino, fue pisada, y las aves del cielo se la comieron; otra cayó sobre piedra, y después de brotar, se secó, por no tener humedad; otra cayó en medio de abrojos, y creciendo con ella los abrojos, la ahogaron. Y otra cayó en tierra buena, y creciendo dio fruto centuplicado."
Dicho esto, exclamó: "El que tenga oídos para oír, que oiga."
María Santiago Cobos y Lucía Jiménez Rodríguez 1º ESO
PARÁBOLA DE LA LEVADURA
ResponderEliminarLa levadura forma parte del pan, pero está en más avanzado estado de desarrollo y pueda operar el cambio de toda la masa que le rodea.
"El Reino de los Cielos es semejante a la levadura que toma una mujer y mezcla con tres medidas de harina, hasta que todo fermenta".
El que acepta el reino no debe separarse del resto de los hombres, por inmaduros que estén. Pero debe tener fuerza interior, entonces, se obrará el prodigio de cambiar la masa amorfa en buen pan de buen trigo.
Alejandro Márquez Pérez 1ESO
Les refirió otra parábola, diciendo: El reino de los cielos es semejante a un hombre que sembró buena semilla en su campo; pero mientras dormían los hombres, vino su enemigo y sembró cizaña entre el trigo, y se fue. Y cuando salió la hierba y dio fruto, entonces apareció también la cizaña. Vinieron entonces los siervos del padre de familia y le dijeron: Señor, ¿no sembraste buena semilla en tu campo? ¿De dónde, pues, tiene cizaña? El les dijo: Un enemigo ha hecho esto. Y los siervos le dijeron: ¿Quieres, pues, que vayamos y la arranquemos? El les dijo: No, no sea que al arrancar la cizaña, arranquéis también con ella el trigo. Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega; y al tiempo de la siega yo diré a los segadores: Recoged primero la cizaña, y atadla en manojos para quemarla; pero recoged el trigo en mi granero».
ResponderEliminarPALÁBOLA DEL BUEN SEMBRADOR.
ResponderEliminarUn hombre sembró semillas en un camino pero no crecieron porque los pájaros se comieron las semillas. Luego sembró en el campo y si crecieron. Y por último sembró en piedras crecieron pero al poco tiempo se secan.
Y al final de la parábola el hombre pudo recoger las buenas plantas que crecieron en el campo.
IRENE AVILES MORALES 1º ESO.
La parábola del buen samaritano.
ResponderEliminarEsta parábola explica que un hombre recibió una paliza y quedó tirado en el camino. Por allí pasó gente cristiana de la que se esperaba ayuda, pero no le hicieron ni caso y no le ayudaron.
Luego pasó un samaritano, que con mucho gusto le ayudó a levantarse y le curó las heridas.
Esta parábola quiere enseñarnos que hay gente de la que esperas ayuda y no la recibes, y sin embargo de otra que no te esperas que te ayuden y te ayudan.
María Rico Pulido & Ana Mª Peinado Valenzuela 1º ESO
Parábola del buen sembrador.
ResponderEliminarUn hombre siembra semillas por muchos lugares del campo.
Algunas semillas cayeron en el camino, otras en las piedras y otras pocas cayeron por un lugar fértil.
Las que cayeron en el camino, se las comieron los pájaros, las que cayeron en los pedregales, brotaron pero se secaron, pero las que cayeron en tierra fértil, brotaron y y dieron lugar a unas plantas fértiles que dieron frutos.
Esto nos enseña que necesitamos tener un corazón recto y bueno para poder dar mucho fruto.
Irene Navas Guerrero y María Jesús Bermúdez Rico 1º ESO.
El buen sembrador
ResponderEliminarEs lo que mejor me se, que quiere enseñarnos que hay que tener paciencia si quieres conseguir lo que deseas. Yo tengo bien poca paciencia por eso me parece tan buena esta parábola.